Apuntes ecuatorianos, observaciones sobre la represión contra la resistencia a los dictados del FMI
Pelao Carvallo
-Colocar militares o exmilitares como Ministros de Defensa solo ayuda a expandir la militarización y a hacer que las soluciones a los conflictos escalen en represión, muerte y pérdida de derechos.
-Hay dos cercos mediáticos: el que impulsa el gobierno con el afán de confundir, dividir, aislar, atemorizar a la gente con el objeto de desmovilizar y derrotar la protesta. El otro es de quienes pretenden instalar un relato heroicista, machista, jovencista, belicista, centrado en la acción de unos pocos que silencia las acciones constantes y permanentes de lxs muchxs. Ojo con lo que trasmitimos porque eso habla de lo que silenciamos. No seamos cómplices del cerco mediático (ejemplos: la poca difusión a la marcha de mujeres en Quito, a la autogestión solidaria para sostener a las comunidades en lucha, la organización de la resistencia y un largo etcétera)
-Las formas, metodologías y prácticas golpistas han variado y quienes hacen análisis no dan ni se dan cuenta de ello. La situación de crisis en Ecuador no es solamente un resultado de una sucesión de hechos, es ante todo la provocación de una cadena de hechos, económicos, políticos y ante todo represivos que pretenden generar un cambio en el régimen democrático sin cambios legales pero si prácticos donde lo represivo se vuelva la respuesta central como forma de control social diluyendo para ello la diferencia entre represión civil y militar
-El conflicto no es, por tanto, solo el “paquetazo” sino la instalación de una democracia militarizada contra las demandas sociales.
-la respuesta social a esos dos conflictos que suceden al mismo tiempo (por interés de los sectores dominantes) está basada en el apoyo mutuo, la solidaridad social, la autogestión de la ayuda, la paciencia, la resistencia. Todas prácticas que escapan a una mirada belicista del conflicto y que dan forma a una estrategia de pedagogía social de la lucha para la resistencia y para la derrota de lo que nos oprime.
-Lxs comunicadorxs populares libertarixs, lxs educadorxs populares libertarixs no han hecho todavía (al menos en esta situación) el cambio del relato heroicista patriarcal y militarizante a un relato de resistencia y construcción, de creación en la lucha y de lucha en el aprendizaje colectivo contra la represión policial, militar, mediática y política.
-Los pueblos aprenden entre ellos, los escudos que se usaban en Venezuela contra Maduro se usan en Ecuador contra Moreno. Cada pueblo sabe que le oprime y lo deja claro llegado el momento. No dudemos de los pueblos, desconfiemos de los gobiernos.
Todo esto desde la lejanía física y desde la extrema cercanía afectiva con quienes resisten hoy en Ecuador a las prácticas políticas desde el Estado que nos afectaran a todxs en América Latina y el Caribe en el futuro.